¡Lo conseguimos…y en su casa! Ésta era la frase más repetida por las jugadoras del C. B. Roque Idafe, un club joven que en tres años no sólo ha conseguido arrebatar la supremacía del baloncesto femenino palmero al mítico C. B. Dominicas; sino también participar una temporada más en la Liga Autonómica.
Una vez más, a un equipo del Valle de Aridane le tocaba cruzar La Cumbre y jugar en territorio enemigo.
Este primer domingo del mes de abril no iba a ser un día cualquiera. Se jugaba la final de la categoría cadete…
El sábado antes de la batalla, el equipo quedó para ver una película e ir motivadas al partido. Y es que el pequeño equipo de El Paso está muy unido y no se quieren separar.
Ese mismo sábado y después de la película, fuimos a cenar a El Paso y allí el entrenador nos entregó unos cordones verdes para las botas. Por la noche, muchas de nosotras estábamos nerviosas, aunque eso no nos quitó el hambre.
Ya llegaba el domingo… y por la mañana, Claudia Mederos, una de las jugadoras (la número 14), decidió hacer un grupo por el móvil en el que estaban todos los miembros del equipo. Era una motivación más donde hubo palabras muy bonitas y emotivas; pero no por ello la victoria iba a estar asegurada.
A las cinco y cuarto de la tarde ya estaba todo el mundo en el Ayuntamiento de El Paso, tanto jugadoras y padres, como afición del equipo.
A las cinco y veinticinco salimos para Santa Cruz.
Cuando llegamos al Pabellón de Miraflores, todavía se estaba disputando el partido entre el C.B. Aridane y el C.B. Doguén, que se jugaban el tercer puesto. Lamentablemente, ganó el Doguén pero les costó bastante.
Ya eras las seis y media y nosotras estábamos dentro de los vestuarios. Todas llevábamos moños y gomina para poder ir iguales. Serias y animándonos entre nosotras y a cinco minutos antes de empezar a calentar, el entrenador Enrique Mederos, entró en el vestuario para darnos una charla motivadora. Sus palabras fueron: “muchos quieren vernos perder, pero no vamos a darles el gusto...”
Tras la charla, salimos de una en una por los vestuarios a la cancha. La música estaba sonando, pero aún así, seguíamos concentradas.
Primer minuto antes de empezar el partido y los entrenadores con sus tácticas en la pizarra. El quinteto principal del Roque Idafe fue el siguiente:
La capitana, Marta Carballo, con el número 12.
Joseline Medina con el número 11.
Lucía Gerónimo con el numero 18.
Alejandra Mederos con el número 16.
Melisa Cabrera con el número 4.
Después fueron entrando las demás jugadoras: Claudia Mederos con el número 14, que el viernes debutando contra el Doguén se hizo una pequeña lesión en el codo derecho.
Naira con el número 22.
Sussan, Leticia, Yanine y Elena, todas ellas jugadoras de categoría infantil.
Éste era todo el equipo del pequeño pueblo, en comparación con el C.B. Dominicas de la capital de la isla.
Las gradas estaban llenas. Por parte del Dominicas hubo tambores para animar a su equipo, y al parecer también se oyeron ciertos insultos desde la grada hacia cierta jugadora del Roque Idafe. La jugadora no mostró interés hacia ellos porque no le parecía correcto dirigirse al público. “Como mejor les voy a callar la boca es jugando bien, si me insultan o no es lo de menos, lo que de verdad me importa a mí es el juego y poder un año más jugar con mi equipo el campeonato de Canarias en Adeje”, pensó en ese momento.
El partido había acabado…¡y tricampeonas con el Roque Idafe!
Nuestra celebración fue muy limpia y en ningún momento nos burlamos del rival. Cuando por fin salieron del pabellón para celebrar lo que habían ganado, era de noche; pero eso a las chicas no les impidió ir a la playa y meterse en ella con el equipaje incluido. La bajada a la playa fue bastante cómica, simplemente por el hecho de que las jugadoras iban con la música a tope en los coches y asomadas por la ventana gritando: ¡campeonas, campeonas! Fue un gran día que jamás se borrará de nuestras memorias.
Es una pena que muchas de las jugadoras del C.B. Dominicas no hayan sabido perder, ya que por el Twitter se dedicaron a criticar y a insultar a una de las jugadoras y a decir que ellas eran las más guapas. Bueno, simplemente añadir, que en el baloncesto no hace falta ser guapo o ser feo, se hace falta ser limpio y buen compañero. El C.B. Roque Idafe obtuvo una victoria de diez puntos al final del partido, lo que tapa todo lo que se dijo en Twitter.